La edad de oro: Mi rostro en el espejo Ivone Guétat Al practicar la obediencia evitamos deformaciones de conducta y vamos purificando nuestras almas para la honra del Señor, pues obedecerlo es amarlo…
Un corazón entendido Dioma de Álvarez Para adquirir sabiduría necesitamos un corazón que escuche a Dios y que esté dispuesto a obedecer